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sábado, 28 de febrero de 2015

Consejos de oro de una dieta

Empezó una y mil veces la dieta para terminar dejándola a los pocos días sin haber adelgazado un gramo? ¡A todas alguna vez nos ocurrió lo mismo! Sin embargo, siguiendo nuestros consejos logrará sacarse definitivamente de encima los kilos de más que la acompañan desde hace tiempo.

He aquí los consejos que valen su peso en oro:

•Cuando sienta la necesidad de comer algo, deténgase antes de producir la ingesta. Piense si realmente come por hambre o simplemente es una cuestión psicológica de ansiedad o aburrimiento.

•Reparta los alimentos en pequeñas raciones y realice varias comidas por día. De esta manera su cerebro recibirá la señal de haber recibido nutrientes y la librará de la sensación constante de petito.

•Contrariamente a lo que afirman las creencias populares, encontrará grandes aliados en las pastas, las bananas y el arroz . Sí, porque al pertenecer al grupo de los hidratos de carbono complejos se digieren con mayor lentitud y la hacen sentir satisfecha por más tiempo.

•Mastique y coma lentamente. De lo contrario no le dará al cerebro el tiempo necesario para recibir la información de que usted ha comido.

•Si mira televisión o charla con alguna amiga, hágalo fuera de la cocina. Las mujeres solemos tomarla como "sala de estar" y nos olvidamos de las tentaciones que nos ofrece (el contenido de la heladera es una de ellas).

•Durante su día libre, evite visitar el supermercado sin una lista. No sabe lo peligroso que resulta improvisar en materia de compra de comestibles (la mano siempre se inclina hacia el postrecito y nunca hacia el yogurt).

•Verifique que la cocción de los alimentos sea la adecuada para conservar sus vitaminas y minerales. Deje las frituras para ocasiones especiales y prefiera la cocina al vapor, al horno o cruda.

•Aunque sólo pueda dedicarle 10 minutos por día a la actividad física, es bueno que alterne el régimen con una pequeña pero constante rutina de ejercicios.

•Nunca lleve la fuente repleta de comida a la mesa. Lleve los platos servidos desde la cocina y si no puede evitar llenarlos a tope, utilice vajilla para postre.

•El pan y la manteca conspiran contra su figura. Elija pickles o un trozo de queso magro mientras aguarda la hora del almuerzo o la cena.


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